Atrapado
Yo
solo era un pajero más, de esos que se meten en chats intentan zorrear con
alguna chica, hacer un relato, sexo escrito y con suerte acabar en Skype
jugando por cam. Cuando salía de fiesta con mis amigos también era uno más de
esos que intentan ligar y hablan con mil mujeres pero que nunca follan.
Poco
a poco empecé a comprender que no me merecía esas mujeres. Ellas eran mujeres
verdaderas y yo no era un hombre verdadero, como mucho un pajero creído que
pensaba que podría follar una noche de fiesta. Mientras me iba dando cuenta de
esta situación encontré por casualidad a Ama Lady Canaria, no la conocía ni
sabía quién era, pero sabía que sería ella quien me diera mi merecido por
pajero salido.
Y
sabía que me daría mi merecido porque desde el primer minuto, sin haber hablado
siquiera con ella, sabía que sería suyo. Su belleza te atrapa, no hay más que
ver imágenes en su blog o Twitter pero su poder aún más. Es una mujer poderosa,
y lo que es mejor, lo sabe; solo tiene que dar una orden para que los perros
como yo obedezcamos a toda prisa. En muchas ocasiones se escucha “sus deseos
son órdenes”, en este caso es así. Los deseos de Lady Canaria son órdenes y es
para lo único que servimos y nuestro único objetivo.
Ahora
ya estoy atrapado, sé que no me puedo meter en los chats y pajearme y que no
debo intentar follar si salgo de fiesta (los perros no follamos). Ahora ya solo
me queda obedecer a mi Diosa y complacerla, ver como se ríe de mí es el mayor
de los placeres que puedo tener.
Dentro
de poco me espera una sesión con ella y me muero de ganas por tenerla. Al fin y
al cabo estoy atrapado, atrapado por su belleza y su poder.
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